Cuando hablamos de las carreteras que transcurren a lo largo y ancho del continente asiático nos pueden venir a la mente varios factores importantes. El primero es que pocas personas lo han recorrido entero en coche dado que es el continente más grande del mundo.
De igual modo nos imaginamos unas carreteras rectas e interminables, sobre todo en la parte de Rusia. Por último, el desarrollo económico de todos los países no es el mismo, existiendo diferencias abismales en la conservación y estado de las carreteras.
Por ejemplo en algunas países como Qatar, Dubai, Arabia Saudi, Japón o China, nos podemos encontrar con carreteras muy bien conservadas y con algunas autovías, pero en otros menos desarrollados como Afghanistan, Uzbekistan, etc. la mayoría de las carreteras son de tierra, por lo que los viajes pueden llegar a ser interminables.