Cuando hablamos del estado mexicano de Yucatán pensamos indudablemente en playas increibles propias del Caribe en el que se situan y en cultura, una que ha resistido durante cientos de años y da muestra ahora del gran imperio que se afincó y desarrolló en estas tierras. Disfrutaremos visitando las ruinas de complejos tan impresionantes como el de Chichen Itzá, y bañandonos en las aguas cristalinas y antiguamente consideradas sagradas de un cenote como el de Ik Kil, escenario ultimamente de campeonatos mundiales de clavados.
La red de carreteras presume de estar muy bien conservada y, sobre todo, de ser de las más seguras de México.